- Estandarizar el desempeño mediante inspecciones , supervisiones, procedimientos escritos o programas de producción.
- Proteger los bienes organizacionales contra los desperdicios, robos o mala utilización , esto mediante la exigencia de registros escritos, auditorias y división de responsabilidades.
- Estandarizar la calidad de productos y servicios ofertados por la empresa.
- Limitar la cantidad ejercida por las diversas posiciones o por los niveles organizacionales, a través de descripciones de cargo, directrices, políticas, normas , reglamentos, etc.
- Medir y dirigir el desempeño de los empleados mediante sistemas de evaluación de desempeño.
- Alcanzar los objetivos de la empresa mediante la articulación de estos en la planeación, y a que ayudan a definir el propósito adecuado y la dirección del comportamiento.
En conclusión el Control administrativo puede ofrecer grandes beneficios para el cliente interno y externo siempre y cuando se lleve su óptima supervisión y retroalimentación.